Riego

Requerimientos de agua al sorgo

Aunque el sorgo es conocido por resistir la sequía mejor que otros cultivos, necesita riego adecuado para alcanzar su máximo rendimiento. La falta de agua en momentos clave como la germinación, el crecimiento inicial, la floración y el llenado de los granos puede perjudicar su desarrollo y reducir la cosecha.

 En general, el sorgo necesita entre 400 y 600 mm de agua durante todo su ciclo de vida, pero esto varía según la variedad, el clima y el tipo de suelo. Algunas variedades son más resistentes a la sequía, mientras que los climas cálidos y los suelos arenosos aumentan las necesidades de agua 

Sistemas de riego

Riego por gravedad

El agua se distribuye por el campo a través de canales y surcos, aprovechando la gravedad, es un sistema relativamente simple y económico de implementar.

Riego por aspersión:

El agua se distribuye en forma de lluvia fina a través de aspersores, permite una distribución más uniforme del agua que el riego por gravedad.

Riego por goteo:

El agua se aplica directamente a la zona de las raíces a través de emisores o goteros, es el sistema más eficiente en el uso del agua, ya que minimiza las pérdidas por evaporación y escorrentía. También permite una aplicación precisa de agua y fertilizantes.

Momentos de riego

El riego en el sorgo debe ser estratégico, enfocándose en las etapas críticas de su desarrollo donde la disponibilidad de agua es determinante para el éxito del cultivo.

Germinación

Importancia: En esta fase inicial, la semilla necesita absorber agua para activar los procesos de germinación y permitir que la plántula emerja del suelo.

Estrategia de riego: Es fundamental mantener el suelo húmedo, pero no encharcado durante este período. Un riego ligero y frecuente puede ser necesario, especialmente si las condiciones son secas.

Establecimiento

Importancia: Tras la germinación, las plántulas jóvenes están desarrollando su sistema radicular y necesitan un suministro constante de agua para establecerse firmemente en el suelo.

Estrategia de riego: Riegos regulares son necesarios en esta etapa para promover el crecimiento de las raíces y el desarrollo de un follaje sano. El monitoreo de la humedad del suelo es clave para evitar tanto el estrés hídrico como el exceso de agua.

Floración

Importancia: La floración es un momento crucial en el que el polen debe ser transferido desde las anteras hasta los estigmas para que ocurra la fecundación y se formen los granos. El estrés hídrico durante esta etapa puede afectar la viabilidad del polen y reducir la formación de granos, impactando negativamente el rendimiento.

Estrategia de riego: Es esencial asegurar un buen suministro de agua durante la floración. Un riego abundante y uniforme ayudará a mantener las plantas turgentes y favorecerá la polinización.

Llenado de grano

Importancia: En esta etapa final, los granos se desarrollan y acumulan almidón y otros nutrientes. La disponibilidad de agua es crucial para asegurar un llenado completo de los granos y alcanzar un alto rendimiento y calidad.

Estrategia de riego: El riego debe continuar hasta que los granos alcancen la madurez fisiológica. Sin embargo, es importante evitar el exceso de agua en esta etapa, ya que puede favorecer el desarrollo de enfermedades y dificultar la cosecha.